Dede Lumajo hasta El Puerto por La
Almozarra, la Sierra del Cornón, Fuente Cerezalina, Boca Ríos y Vega Cimera
Lumajo es una localidad y también
pedanía del municipio de Villablino, en la comarca de Laciana. Hasta Lumajo se
llega por la LE-492 que parte de la C-623 en Villaseca de Laciana. Como
Villablino linda al norte con Somiedo, siempre es apropiada una caminata entre
ambos términos a través de valles, altos y vegas de las dos vertientes de la
cordillera.
La principal vía que desde el norte
de León llega a Somiedo es la C-633 que enlaza con la AS-227 para descender
hasta La Pola. Y la primera localidad asturiana que atraviesa es El Puerto,
único núcleo de población de su parroquia, Santa María del Puerto, y el lugar
habitado más alto del concejo. Pues bien, entre Lumajo en Villablino y Santa
María del Puerto en Somiedo, a traves de la cordillera, discurre esta caminata
del grupo La Peñuca propuesta y coordinada por Manuel Obaya.
Una de las lagunas que se encuentran en esta caminata.
Lumajo, con su caserío bien apretado,
se encuentra a 1 400 metros de altitud en el valle que lleva su nombre.
Iniciamos el camino por una pista de tierra en la margen izquierda del río La
Almozarra; es un camino agradable, que va ganando altura de forma moderada por el valle. A nuestra izquierda dejamos las brañas del Navariego y más arriba, la majada de la Regada con su nave para recoger el ganado. Ya vemos las cumbres que nos esperan; después de cruzar algunos arroyos, llegamos al punto donde la pista se
convierte en sendero entre pradería y monte bajo, y el río ya es un arroyo
alimentado por manantiales que encontramos al paso, como la fuente de La
Almozarra de Abajo en las Cabañas de los Rozaos.
Casi desde el inicio del camino, de izquierda a derecha
los picos Cornón, Regada y Aspía.
Luego veremos la fuente de La
Almozarra de Arriba, poco antes de encontrarnos con los Barrancos de la
Almozarra; el camino discurre entonces sobre las pizarras del propio cauce del
arroyo bajo la alargada Loma de La Almozarra. Es un paso espectacular, que ya
en el pueblo se nos anunciaba en un cartel como uno de los lugares más
llamativos de la montaña de Laciana.
Al salir del barranco, y después de
un tramo bastante pendiente, llegamos a la Vega de La Almozarra a 1 877 metros
de altitud, donde hay, como en todo el camino recorrido hasta ahora, bastante
ganado. Aquí enlazamos con el PR-AS 10 Ruta del Cornón, que viene desde El
Puerto y al que nosotros seguiremos por la sierra para alcanzar su punto más alto. Ya
la vista que nos rodea comienza a ser de lo más interesante; aunque sólo una
muestra de lo que veremos desde la cima.
Por el Barranco de La Almozarra.
Ascendiendo sin tregua por las lomas
de la sierra, eligiendo siempre los mejores pasos entre el espeso monte bajo,
llegamos a la horcada entre los picos Asta y Cornón, a 2 055 metros de altitud.
Es el último peldaño antes de atacar la vertical ladera hacia el vértice
geodésico del Cornón, que con sus 2 188 metros de altitud, situado en la divisoria
entre Asturias y León, es el techo de Somiedo.
El pico Cornón es uno de los más
afamados y también de los más visitados,
pues a él se puede llegar desde varios puntos de León o Asturias; por ejemplo
desde Brañaviecha, en la parroquia de Villar de Vildas o desde La Peral, pueblo
vaqueiro en la parroquia de Gúa. Y es también uno de esos puntos de la
cordillera Cantábrica desde los que parece divisarse "el mundo entero";
sobre todo si contamos con un luminoso día de otoño como el que hoy
disfrutamos.
El ascenso a la cumbre después del último peldaño.
Por supuesto, hacia el este se
levanta el inevitable Macizo de las Ubiñas y hacia el norte el panorama alcanza
hasta el mar; pero más cerca nos sorprende la vista de parte de la zona urbana
de la villa de Tineo bajo su sierra cubierta de eólicos. Más cerca aún, al
suroeste, por tierras de Cangas del Narcea apreciamos el recorrido comentado en
el artículo anterior, y frente a nosotros la estación invernal de Leitariegos y
el Cueto de Arbas.
Vista hacia las tierras de Cangas del Narcea;
en el centro, atrás, el pico Rabo de Asno.
Con la espalda protegida de cierta
brisa que viene del norte, nos sentamos para el descanso y la comida mirando
hacia el sur; entonces la conversación discurre sobre el bellísimo valle de
Peñarrubia con sus majadas, brañas y lagunas que alimentan al río Sosas,
afluente del Sil. Divisamos hasta Villablino y el embalse de Las Rozas, más
allá de este valle que en ocasiones apellida al pico donde nos encontramos: el
Cornón de Peñarrubia, para diferenciarlo de otras cumbres con el mismo orónimo
que tanto abunda en su significado de lugar extremo, apuntalado y rocoso.
Fue agradable el descanso sobre el hermoso valle de Peñarrubia.
Al iniciar el descenso de la cumbre,
después de tan agradable estancia, dejamos a nuestra izquierda las pequeñas
lagunas que son el nacimiento del río Pigüeña y llegamos al collado El Barroso
(1 884 metros). Allí también hay varias lagunas; en este caso, el origen del
río Borrones o de La Peral, que junto con otros arroyos forma la cabecera del
río Somiedo.
Atrás queda el Cornón con su aspecto rocoso y arenoso.
Siguiendo las señales del citado
PR-AS 10 llegamos al Boquete de La Almozarra (1 756 metros), en el límite entre
Asturias y León; se trata de la embocadura del valle por donde anduvimos la
primera parte del camino, y fue frecuente lugar de paso de la trashumancia
extremeña hacia los pastos del norte. Caminamos ya de forma definitiva por
tierras de Somiedo, aunque aún sea la vertiente sur de la cordillera; pues
todas las aguas de esta parroquia de Santa María del Puerto, la más meridional
del concejo, vierten al río Sil a través del llamado arroyo del Puerto.
El Boquete de La Almozarra.
Pasamos por zona de buenos pastos
comunales en la ladera del Alto Prefuste y del pico Miru Malu que sitúan la
divisoria interprovincial, y después de Fuente Cerezalina llagamos a Boca Ríos.
Se trata de una pequeña pradera por la que serpentea un arroyo que allí mismo nace
y se oculta en una sima en la base de la peña.
Por la pradera ascendemos al cordal
y desde allí ya contemplamos la amplia vega, el arroyo del Puerto y, al fondo,
el agradable caserío donde nos espera el final del camino. Primero encontramos
la llamada Vega Cimera y por ella descendemos hasta el llano. Es muy bello el
entorno de El Puerto: esa amplísima vega con prados de siega y diente cercados
de piedra, que ofrecen excelentes pastos al ganado vacuno.
Santa María del Puerto; el caserío y su entorno.
Recorremos la vega por la margen
derecha del arroyo, hasta que lo cruzamos y entramos en el pueblo, donde hay un
área recreativa y una oficina de información. Aquí finalizamos, a 1 486 metros
de altitud, esta caminata en un hermoso día de primeros de otoño. Y es que a mí
me gusta caminar por la vertiente sur de la cordillera; ya sea, como en este
caso, por los montes de Laciana y el sur de Somiedo, por la incomparable Babia,
Omaña, Luna o también la montaña más oriental de León: una zona que nunca
defrauda y por la que siempre resulta agradable andar haciendo camino.
La fuente de la Cueña, a la entrada de Lumajo,
donde empezó la caminata.
Las fotos son de Ana Fabián.
(El
grupo de montaña La Peñuca de Gijón realizó esta ruta el sábado, 1 de ocrubre
de 2016).
No hay comentarios:
Publicar un comentario